Palma de Mallorca es mucho más que la capital de las Islas Baleares. Es una ciudad que combina historia, cultura, playas de ensueño y una gastronomía que enamora. Si estás planeando una visita, aquí te dejamos una guía con los lugares que no te puedes perder. Desde la majestuosa Catedral de Mallorca hasta las calas de aguas cristalinas, Palma tiene algo para todos. ¡Vamos a descubrirlo!
La Catedral de Mallorca, también conocida como La Seu, es uno de los símbolos más reconocibles de la ciudad. Situada junto al mar, esta impresionante construcción gótica te dejará sin palabras. No te pierdas su rosetón, uno de los más grandes del mundo, que filtra la luz del sol creando un espectáculo de colores en el interior. Si puedes, visita la catedral al atardecer: el juego de luces es simplemente mágico.
El Castell de Bellver es otro de los imprescindibles que ver en Palma de Mallorca. Este castillo de estilo gótico, único en Europa por su planta circular, ofrece unas vistas espectaculares de la ciudad y la bahía. Además, alberga un museo que te transportará a la historia de la isla. Es un lugar perfecto para una mañana de exploración y fotos increíbles.
Si viajas con niños o simplemente te fascina el mundo marino, el Palma Aquarium es una parada obligada. Con más de 8.000 especies y el acuario de tiburones más profundo de Europa, este lugar te sumerge en la biodiversidad del Mediterráneo y los océanos. Ideal para un día divertido y educativo.
El Paseo del Borne es la calle más chic de Palma. Rodeada de tiendas de lujo, cafeterías y restaurantes, es el lugar perfecto para pasear, tomar un café o disfrutar de una cena con vistas. Además, es un punto de partida ideal para explorar el casco histórico de la ciudad.
Aunque no está en el centro de la ciudad, Caló del Moro es una de las calas más bonitas de Mallorca y merece una escapada. Sus aguas turquesas y su entorno rocoso la convierten en un lugar de ensueño. Eso sí, llega temprano para asegurarte un buen sitio, ¡es un lugar muy popular!
Si quieres vivir la esencia local, no puedes perderte el Mercat del Olivar. Este mercado tradicional es el lugar perfecto para probar productos frescos de la isla, desde quesos mallorquines hasta embutidos y mariscos. Además, es una excelente opción para comer algo rápido y delicioso.
El Palau de l’Almudaina, antigua residencia de los reyes de Mallorca, es una joya arquitectónica que combina estilos árabes y góticos. Hoy en día, es uno de los lugares más visitados de Palma y una parada obligada para los amantes de la historia. No te pierdas sus jardines, que son un remanso de paz en pleno centro de la ciudad.
Si buscas playas cerca de la ciudad, la Playa de Cala Mayor es una excelente opción. Con su arena fina y aguas tranquilas, es ideal para relajarse después de un día de turismo. Además, cuenta con todos los servicios necesarios para pasar un día perfecto.
Palma de Mallorca es una ciudad que enamora a primera vista. Con su mezcla de historia, cultura y naturaleza, ofrece una experiencia única que difícilmente olvidarás. Ya sea que estés planeando una escapada rápida o unas vacaciones largas, esta guía te ayudará a descubrir lo mejor de la capital balear. ¡Buen viaje!